Éste proyecto trata de pacientes que acuden a nuestro servicio para la realización de un TAC con contraste yodado intravenoso, son pacientes que por lo tanto acuden en ayunas y con unos factores de vulnerabilidad (como pueden: Procesos Oncológicos, Diabetes, Creatinina elevada, Edad avanzada …) que los hacen especialmente sensibles. Hasta la puesta en marcha de este proyecto, lo habitual era que estas personas tuvieran que estar en una sala de espera convencional durante el periodo de tiempo normalmente necesario en estas pruebas, aproximadamente una hora. La espera se hacía incómoda, en ayunas, con poca intimidad y con el riesgo de poder sufrir algún tipo de indisposición o desvanecimiento sin monitorización profesional. A partir de la implementación de los Desayunos Solidarios, esta situación cambió completamente ya que, una vez acabada la prueba, se traslada al paciente a la zona habilitada, ya que mientras que se le ofrece el desayuno, se le administra un suero intravenoso para hidratar el riñón y minimizar la nefrotoxicidad que puede provocar el contraste, ésta administración de suero puede llegar a tardar hasta una hora, por lo que hacemos pasar a un familiar que lo acompañe y así crear un área de confort tanto para el paciente como para el familiar.
Por parte de la enfermera del servicio y en base a éstos criterios los viernes de cada semana selecciona los pacientes que cumplen esos requisitos y elabora una lista para coordinarnos con cocina sobre el número de desayunos que vamos a necesitar.
Éste desayuno es un detalle con un coste mínimo y un agradecimiento máximo por parte del paciente y así es como lo percibimos.