Afrontar, el proceso de dejar de fumar

ASOCIACION DE PACIENTES
Organización de pacientes nacional e internacional
Otro
OAFI – Osteoarthritis Foundation International
Jose Luis Baquero Úbeda. Coordinador de RSC, RRII y apoyo científico en OAFI y AECOSAR, Josep Vergés Milano. Presidente de OAFI y AECOSAR, Manel Santiñà Vila. Past-president y coordinador de Investigación de SECA, Nina Martinez Fernández. Coordinadora de científico e I+D de OAFI, Sheng Jie Lin. Científico e I+D de OAFI, Joan Carles Pallares Vergés. Paciente experto y comunicación de OAFI, Alejandro Baquero Zazo. Enfermero y voluntario de OAFI, Rita Bachiller López. Técnica de Laboratorio y Anatomía Patológica, voluntaria de OAFI, ,
Resumen ejecutivo
En España, la esperanza de vida al nacer sitúa la media por encima de los 80 años; y se estima que la población mayor de 65 años será del 35% en 2030. Esto unido a que el 60% de las personas mayores de 65 años sufren más de una enfermedad crónica, hace que la mayoría de las personas de edad avanzada son pacientes, siendo la patología osteoarticular especialmente prevalente en esta población.

Fumar se ha relacionado con numerosas enfermedades, incluyendo el cáncer, problemas metabólicos, en el sistema respiratorio, cardiovascular, digestivo, urinario, reproductor y articular, entre otros. De hecho, el tabaco mata a la mitad de sus consumidores como asegura la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Desde OAFI entendemos que la prevención del acceso al tabaco es crucial, pero también consideramos esencial brindar apoyo a aquellos que desean dejar de fumar. En este sentido, hemos promovido el proyecto Afrontar el proceso de dejar de fumar, con el objetivo principal de mejorar la capacidad de afrontamiento y autocuidado del paciente con patología osteoarticular para dejar de fumar. Los objetivos secundarios incluyen identificar las principales barreras que se enfrenta; valorar la efectividad de las estrategias de afrontamiento y hacer propuestas de mejora.

El Grupo Nominal lo componían 11 fumadores y exfumadores recientes (menos de 5 años) con patología osteoarticular, mayores de edad, anonimizados que dieron consentimiento informado. Se desarrolló en dos etapas, 1º Grupo Nominal en formato telemático a través de videoreunión, siguiendo el método descrito por McMillan, señalando las barreras en la esfera física, emocional, social y laboral; así haciendo propuestas; y 2º vía correo electrónico, para dar respuesta independiente, se jerarquizaron estas y la efectividad de las estrategias de afrontamiento, sobre una escala Likert del 1 al 10 (mínima y máxima respectivamente):

1.Proactividad. Poner medidas uno mismo para resolver el problema
2.Autocrítica. Ser crítico con uno mismo, para mejorar
3.Manifestación emocional. Expresar lo que se siente
4.Pensamiento desiderativo. Buscarle el lado bueno
5.Apoyo social. Hablar con una persona de confianza
6.Reestructuración cognitiva para intentar ver lo positivo de las cosas
7.Evitación de problemas No dejar que afecte y evitar pensar demasiado en ello
8.Retirada social, ocultándose.

Las cuatro principales barreras seleccionadas fueron: en el aspecto físico, la adicción a la nicotina; en el emocional, el placer y ayuda que aporta; en cuanto al social, el fácil acceso; y en lo laboral, acompañar o la presión de los compañeros.

Las estrategias más efectivas de afrontamiento incluyen el ser crítico con uno mismo (autocrítica), el poner medidas uno mismo (proactividad) e intentar ver lo positivo (reestructuración cognitiva); mientras que no lo es, el ocultarlo (retirada social).

Dejar de fumar es un desafío real y complejo; y la satisfacción con la ayuda prestada desde el SNS a los fumadores es limitada, así como el mínimo acompañamiento en el proceso para dejar de serlo, considerándose como alternativa muy adecuada, el reducir al menos el daño.

JUSTIFICACIÓN
(Bibliografía en anexo)

En las últimas décadas, la esperanza de vida al nacer y a los 65 años ha aumentado significativamente en España tanto para hombres como para mujeres, situándose en 79,6 años para los hombres, y 85,1 años para las mujeres; y las personas de 65 tienen una esperanza de vida promedio de 24,5 años (1). De hecho, se estima que, en 2030, el 35% de la población española será mayor de 65 años, y este porcentaje aumentará hasta el 50% para el año 2050 (2).

En nuestro país, el 60% de las personas mayores de 65 años sufren al menos una enfermedad crónica (3), lo que significa que la mayoría de las personas de edad avanzada son pacientes, siendo las patologías articulares muy comunes en esta población (más del 50% de la población mayor de 65 años tiene artrosis (4)). Además, estas patologías afectan a las mujeres 2-3 veces más que a los hombres; destacando dos patologías articulaciones en nuestra consulta solidaria de la Osteoarthritis Foundation International (OAFI), la artrosis (u osteoartritis, OA) y la osteoporosis (OP).

La OA es una enfermedad crónica que afecta a las articulaciones y se caracteriza por la degeneración del cartílago, hueso subcondral y tejidos blandos de la articulación. La importancia del tejido óseo subcondral es capital, ya que sostiene el cartílago y lo nutre. En España, han sido diagnosticadas más de 7 millones de personas, pero el número de personas con lesiones observables radiológicamente supera el doble (5), siendo una patología invalidante, que, debido al dolor, merma la movilidad y autonomía; y por ello es la tercera enfermedad crónica más frecuente en atención primaria (6) y la enfermedad crónica más prevalente entre los ex-deportistas de alto rendimiento (7-8).

Por otro lado, la OP es también una enfermedad crónica, que debilita los huesos y aumenta el riesgo de fracturas óseas. En España, más de 3,5 millones de personas han sido diagnosticadas, pero muchas más padecen osteopenia, una etapa previa a la osteoporosis (9). Es importante destacar que el 30% de las personas mayores de 65 años en España sufren al menos una caída al año, aumentando al 50% en personas mayores de 80 años (10), lo que ocasiona 1 fractura por fragilidad cada 2 minutos (11). Es una situación grave, que cursa con dolor y puede incluso desembocar en la muerte (20-30% en el primer año tras fractura (10)) y solo el 40% de los pacientes recupera su calidad de vida original (12).

Fumar perjudica gravemente a la salud y no hay ninguna duda al respecto. Se ha demostrado que está relacionado con diversas enfermedades, incluyendo el cáncer, problemas en el sistema respiratorio, cardiovascular, digestivo, urinario y reproductor, entre otros. De hecho, el tabaco mata a la mitad de sus consumidores como asegura la Organización Mundial de la Salud (OMS) (13).

Además, fumar afecta a los huesos y articulaciones. Según la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Óseas (FHOEMO) (14), los fumadores tienen entre un 30% – 50% más probabilidad de fracturarse la cadera que los no fumadores de la misma edad. Fumar se considera un factor de riesgo para la OP, pues reduce el aporte de oxígeno a los huesos, disminuye la absorción del calcio de la dieta y reduce los niveles de estrógeno, entre otras razones.

Por otro lado, los fumadores con OA de rodilla sufren una mayor pérdida de cartílago y tienen un dolor más intenso que quienes no fuman (15). Además, se asocia significativamente OA de cadera, la obesidad, la diabetes y la dependencia del tabaco, con la enfermedad degenerativa del disco intervertebral (16).

En cuanto al dolor crónico, se ha observado un aumento significativo en la intensidad del dolor en mujeres fumadoras (17) y el consumo de tabaco se ha asociado con una mayor prevalencia de dolor lumbar (18).

Desde OAFI entendemos que la prevención del acceso al tabaco es crucial, pero también consideramos esencial brindar apoyo a aquellos que desean dejar de fumar.

De hecho, la OMS define la salud no solo como la ausencia de enfermedad sino como un estado de bienestar físico, psíquico y social (19). Observamos que, aunque los servicios sanitarios dirigen, prioritariamente, su esfuerzo a prevenir la adicción y a tratar la dependencia a la nicotina, a menudo carecen de un enfoque holístico al abordar la problemática de la persona fumadora. Para nosotros, es necesario tratar al paciente de manera integral, abordando aspectos físicos, emocionales y sociales.

PLANIFICACIÓN Y/ O CRONOGRAMA
Desde OAFI y AECOSAR (Asociación Española con Osteoporosis y Artrosis), en noviembre de 2023 se invitó a pacientes con el perfil de ser fumadores o exfumadores recientes (menos de 5 años), sufrir patología osteoarticular, ser mayores de edad y residir en el territorio español. El objetivo al formar dos grupos nominales es simular un «paciente experto» mediante la colaboración de diversos afectados, con el fin de motivar, informar y apoyar a los pacientes fumadores en su proceso para dejar de fumar, así como conocer las barreras físicas, emocionales, sociales y laborales que enfrentan, evaluar las estrategias de afrontamiento frente a la selección de dichas barreras y hacer propuestas de mejora.

Los participantes en los grupos nominales deben tener mismo perfil que el estudiado, pero no se busca un tamaño de muestra representativo de la población, debiéndose limitar el número a un grupo de discusión manejable, recomendándose en dicho método no superar la docena. A todos ellos se les solicitó previamente el consentimiento informado, una vez comprobado que cumplían con los criterios de inclusión: edad, condición de fumador, patología articular y la comunidad autónoma de residencia. Junto a estos datos se recogió el género, y los hábitos de vida.

Las respuestas de los participantes se han anonimizado para preservar su privacidad, y de acuerdo a la Ley Orgánica de Protección de Datos (LOPD), no se revelarán las identidades de los pacientes.

El proyecto Afrontar el proceso de dejar de fumar se desarrolló en dos etapas:

1.Grupo Nominal en formato telemático a través de dos videoreuniones los días 15 y 16 de noviembre de 2023, señalando motivaciones, barreras y aportando sugerencias.
2.Posteriormente se llevaron a cabo dos contactos sucesivos vía correo electrónico, para dar respuesta individual e independiente:
1.El viernes 17 se enviaron las barreras consensuadas para jerarquizar.
2.El viernes 24 de noviembre se envió un segundo correo para valorar la efectividad de las ocho estrategias de afrontamiento.

Se ofreció un plazo de una semana en cada ocasión, para enviar las respuestas.

ENFOQUE
Desde OAFI hemos promovido el proyecto Afrontar el proceso de dejar de fumar, para:

– Como objetivo principal, mejorar la capacidad de afrontamiento y autocuidado del paciente con patología osteoarticular para dejar de fumar.
– Los objetivos secundarios incluyen identificar las barreras que enfrentan los pacientes con patología osteoarticular que desean dejar de fumar; así como valorar la efectividad de las estrategias de afrontamiento y hacer propuestas de mejora en este proceso.

DESARROLLO Y EJECUCIÓN
El proyecto Afrontar el proceso de dejar de fumar se desarrolló en dos etapas:

1.Grupo Nominal en formato telemático a través de dos videoreuniones los días 15 y 16 de noviembre de 2023, siguiendo el método descrito por McMillan (20):

1.Señalando las principales situaciones de motivación para dejar de fumar.
2.Se identificaron las barreras de naturaleza física, emocional y social (diferenciando en esta última, la del entorno y la esfera laboral).
3.Se valoraron en conjunto también ciertos aspectos concretos, como:
•El conocimiento que tiene el propio fumador del daño sobre la salud en general.
•La conciencia del daño de fumar sobre los huesos y las articulaciones.
•La dificultad para dejar de fumar.
•Los intentos previos para dejar de fumar.
•El apoyo recibido desde el Sistema Nacional de Salud (SNS).
•El acompañamiento en el proceso de dejar de fumar, desde el SNS.
•Si no se puede dejar de fumar, se valoró el interés por “reducir el daño”.
•El papel de las organizaciones de pacientes.
4.Se sugirieron “factores de éxito” para dejar de fumar.

2.Posteriormente se llevaron a cabo dos contactos sucesivos vía correo electrónico, para dar respuesta individual e independiente:

1.El viernes 17 se enviaron las barreras consensuadas en la reunión para que los participantes las valoraran se su relevancia sobre una escala Likert del 1 (mínima) al 10 (máxima), siendo así jerarquizadas.

Se determinó media y desviación estándar (DE) mediante las herramientas estadísticas de Microsoft Excel 2012, considerando relevantes las puntuadas con media superior a 5; y entre estas, fueron seleccionadas las 4 más puntuadas, correspondiendo cada una al aspecto físico, emocional, del entorno social y laboral.

También se dio la oportunidad de completar la lista de motivaciones, factores de éxito y sugerencias para dejar de fumar.

2.El viernes 24 de noviembre se envió un segundo correo para valorar la efectividad de las ocho estrategias de afrontamiento (21-22), para combatir las cuatro barreras seleccionadas, sobre una escala Likert del 1 al 10 (mínima y máxima efectividad estimada, respectivamente):
1.Proactividad. Poner medidas uno mismo para resolver el problema
2.Autocrítica. Ser crítico con uno mismo, para mejorar
3.Manifestación emocional. Expresar lo que se siente
4.Pensamiento desiderativo. Buscarle el lado bueno
5.Apoyo social. Hablar con una persona de confianza
6.Reestructuración cognitiva para intentar ver lo positivo de las cosas
7.Evitación de problemas No dejar que afecte y evitar pensar demasiado en ello
8.Retirada social, ocultándose.

Se recogieron las respuestas como prueba piloto, hasta el viernes 1 de diciembre de 2023.

Consideramos “recomendables” las estrategias valoradas con media superior a 7 en la escala Likert; y “no recomendables”, las valoradas con una puntuación inferior a 3 (baja efectividad); considerando las valoraciones 4, 5, y 6 como indefinidas.

DESPLIEGUE
Participaron 11 pacientes, 7 mujeres y 4 hombres, con una edad media de 52,80 (DE 12,16), siendo 7 fumadores en la actualidad y 4 exfumadores recientes; procedentes de 4 comunidades autónomas: 5 de Madrid, 4 de Cataluña, 1 de Castilla León y 1 de Castilla La Mancha.

Algo más de la mitad (6 participantes) declaran la coincidencia con ciertos hábitos poco saludables, por el sedentarismo (todos ellos, 6) o inadecuada alimentación (2).

RESULTADOS
Las principales situaciones identificadas, que animan a dejar de fumarlas, fueron:
•La conciencia de las limitaciones que produce la dependencia: transporte público, comercios, reuniones, etc.
•La conciencia de las limitaciones físicas: afonía, se respira mal, no se puede subir escaleras, etc.
•La conciencia de los problemas de salud: bronquitis y tos persistente, muere un fumador conocido, etc.
•Por la presión social y aislamiento
•Tos y mucosidades matutinas.
•Quejas desde el entorno afectivo, para dar un buen ejemplo o alegría a los seres queridos.
•Recomendaciones de profesionales de la salud (médico, enfermera, farmacéutico, dentista, etc.).
•Aspectos estéticos (pelo, piel, dientes, etc.) y olor (ropa, aliento, etc.)
•Embarazo, lactancia, o convivencia con niños pequeños o personas mayores.
•Coste financiero y de salud asociado al tabaco. “Fumar sale muy caro”.

Las barreras identificadas, señalándose las que estuvieron por encima de 5 en la escala Likert en rojo y en amarillo la de puntuación mayor, fueron:

FÍSICO – Media (DE)
Adicción a la nicotina8,7 (1,41)
No tengo fuerza de voluntad7,4 (1,74)
Síndrome de abstinencia físico (muy intenso en 1ª semana – 1º mes) 7,1(1,45)
El cigarro más difícil de dejar, es el de primera hora (abstinencia nocturna) 6,4(2,88)
Ayuda a relajarme (físicamente)6,2(3,15)
Aumentar de peso – engordar 5,2(2,91)
Necesidad de tener algo en la mano4,3(2,87)
Necesidad de llevarse algo a la boca3,9(2,32)
No se duerme 3,7(3,04)

EMOCIONAL -Media (DE)
Lo sigo siendo porque es un placer, me gusta, tranquiliza, relaja…7,2(2,91)
El tabaco “es un amigo” que te acompaña cuando le necesitas (al estar triste, aburrido, etc.)6,9(2,67)
Nunca se encuentra el momento adecuado para dejarlo6,9(3,04)
Ayuda a relajarme (emocionalmente)6,4(1,94)
Difícil superar el síndrome de abstinencia psíquica/emocional (años)6,2(2,44)
Situaciones de estrés6,1(2,15)
Dejarlo me pone triste y causa ansiedad5,9(2,15)
Nos ocultamos a nosotros mismos, que nos hace daño. “De algo se tiene que morir”3,3(2,24)
Trae recuerdos placenteros2,9(1,96)

ENTORNO SOCIAL -Media (DE)
Es muy fácil acceder6,4(2,96)
No he tenido acceso a un soporte de deshabituación eficiente6,2(2,39)
Ciertos actos sociales lo dificultan: fiestas, ocio, etc.6,2(2,77)
La soledad lleva a fumar, pues falta motivación5,9(3,26)
Ha sido un hábito aceptado mucho tiempo y hemos sido así educados desde niños5,8(3,53)
Mi reacción hacia la pareja y entorno es más dañina, que el propio daño de fumar4,1(2,57)
Recibir información contradictoria3,9(2,30)
Aunque yo lo deje, seré afectado como “fumador pasivo”3,4(1,74)
Mi pareja/entorno fuma y es una tentación 3,1(3,09)

LABORAL – Media (DE)
Es un acto social necesario, acompañar a compañeros6,1(2,85)
Ir a la oficina propicia fumar: en el coche, paradas del transporte, compañeros que invitan, etc.5,4(3,31)
Propicia encuentros distendidos con el jefe, clientes u otras personas de interés 5,3(3,25)
Teletrabajar libera de las restricciones de fumar (en aplicación de la ley) 4,3(2,63)
Perdería un tiempo de pausa, que generalmente se concede4,1(2,42)

Sobre la media de la valoración hecha sobre la escala Likert del 1 al 10:
•La conciencia del daño de fumar sobre la salud general, fue de 9,20 (DE 1,23).
•La conciencia del daño de fumar sobre la salud articular, fue 3,60 (DE 3,31).
•La dificultad en dejar de fumar, fue 9,30 (DE 1,57).
•Las veces que se ha intentado dejar de fumar, fueron 3,25 (DE 1,54).
•El acompañamiento en el proceso de dejar de fumar, desde el SNS: 2,11 (DE 1,76).
•Si no se puede dejar de fumar, se valoró el interés por “reducir el daño”: 9,67 (DE 1,00).
•El papel de la Asociación de Pacientes: 8,78 (DE 0,97).

El apoyo recibido desde el SNS se valoró sobre una escala Likert del 1 al 4: 2,67 (DE 2,55).

En cuanto a la efectividad de las 8 estrategias de afrontamiento, las valoraciones fueron:

FÍSICO – Adicción a la nicotina – Media (DE)
1Poner medidas uno mismo para resolver el problema7,6(2,12)
2Ser critico con uno mismo, para mejorar8,0(1,83)
3Expresar lo que se siente5,9(3,31)
4Ver la situación como uno la desearía (buscarle el lado bueno) 6,1(2,33)
5Hablar con una persona de confianza 5,8(2,90)
6Intentar ver lo positivo de las cosas7,7(1,25)
7No dejar que afecte y evitar pensar demasiado en ello5,9(3,48)
8Ocultar lo que se piensa y se siente 2,1(1,85)

EMOCIONAL – Es un placer, me gusta, tranquiliza, relaja… – Media(DE)

1Poner medidas uno mismo para resolver el problema8,8(1,99)
2Ser critico con uno mismo, para mejorar8,6(1,90)
3Expresar lo que se siente6,5(3,21)
4Ver la situación como uno la desearía (buscarle el lado bueno) 6,1(2,33)
5Hablar con una persona de confianza 5,8(2,66)
6Intentar ver lo positivo de las cosas7,3(0,82)
7No dejar que afecte y evitar pensar demasiado en ello5,8(2,90)
8Ocultar lo que se piensa y se siente 2,2(1,93)

SOCIAL – Es muy fácil acceder – Media(DE)

1Poner medidas uno mismo para resolver el problema7,5(1,84)
2Ser critico con uno mismo, para mejorar6,6(2,27)
3Expresar lo que se siente6,5(2,46)
4Ver la situación como uno la desearía (buscarle el lado bueno) 6,3(2,67)
5Hablar con una persona de confianza 5,5(2,63)
6Intentar ver lo positivo de las cosas6,1(1,29)
7No dejar que afecte y evitar pensar demasiado en ello7,2(2,25)
8Ocultar lo que se piensa y se siente 3,5(2,99)

LABORAL – Es un acto social necesario acompañar a compañeros – Media (DE)

1Poner medidas uno mismo para resolver el problema8,3(2,26)
2Ser critico con uno mismo, para mejorar7,5(1,96)
3Expresar lo que se siente6,7(2,75)
4Ver la situación como uno la desearía (buscarle el lado bueno) 6,3 (1,57)
5Hablar con una persona de confianza 6,4(2,59)
6Intentar ver lo positivo de las cosas7,1(1,91)
7No dejar que afecte y evitar pensar demasiado en ello4,8(3,19)
8Ocultar lo que se piensa y se siente 3,8(3,33)

Los factores de éxito y sugerencias, para dejar de fumar han sido:
•Cada uno debe conocerse a sí mismo y las circunstancias que más le afectan.
•Cambiar hábitos que hagan añorarlo y evitar circunstancias desencadenantes.
•Hacer uso de las ayudas, elementos sustitutivos o reemplazo. Incluso combinando varios.
•Convencerse, terapias psíquicas e hipnosis.
•Hacer ejercicio.
•Hacer actividades manuales.
•Mantenerse muy ocupado.
•Mascar chicle, tomar caramelos, frutos secos, etc.
•Beber agua.
•Planificarlo. Establecer metas. Limitar el número y alargar plazos (gradual, al menos con ello se reduce el daño).
•Técnicas de relajación.
•Buscar un cómplice o compañero para mantener la disciplina.
•Despedirse del tabaco, darle entierro, encerrarlo en un cajón …
•Invertir el ahorro de no fumar, en una afición apreciada.
•No caer en el “sólo uno más” o “este es el último”.
•Meter en una hucha el dinero ahorrado de los paquetes de tabaco no fumados.
•Deshacerse del tabaco, mecheros, ceniceros y todo lo relacionado con el tabaco que tengamos a la vista.
•Solo se consigue con un férreo compromiso de la persona. Tiene que querer hacerlo absolutamente.

EVALUACIÓN Y REVISIÓN
Considerando a la persona en su conjunto y no solo en términos de una enfermedad concreta, es innegable que fumar afecta a su salud, ya sea en términos articulares o como factor de riesgo para desarrollar otras patologías. Además, en nuestra sociedad cada vez se observa una tendencia común a no seguir hábitos saludables, destacando el sedentarismo.
La relación entre fumar y patologías como la respiratoria, cardiovascular, el cáncer, etc. se conoce en la población y constituye la principal motivación para dejar de fumar. De hecho, los participantes comentan “cuando coges una gripe, resfriado, bronquitis etc. te arrepientes de todo lo fumado”; junto a las limitaciones físicas y dependencia. No obstante, la relación con la afectación articular y el dolor, es menos conocida.
A pesar de la conciencia de los riesgos, existen numerosas barreras que dificultan el abandono del hábito, lo que hace que la deshabituación del tabaco sea un desafío muy alto; y muy habitual haberlo pretendido sin éxito en numerosas ocasiones. Tal como se declara “dejar de fumar es muy difícil, pero no imposible” lo peor es que “eres exfumador (y en riesgo) el resto de tu vida”. La recaída no debe considerarse como un fracaso, sino como una oportunidad para aprender acerca de lo que contribuye o dificulta la experiencia.
La generación “baby boom” que ahora tiene entre 40 y 60 años y suponen los estratos de edad con mayor población (23), fue educada, desde niños y durante mucho tiempo, en un entorno que normalizaba el hábito de fumar, en el entorno social Incluso se regalaban “cigarritos de chocolate”, relacionándose con un signo de madurez, quedando demasiado interiorizado en la cultura, lo que dificulta su deshabituación.
Es frecuente empezar pensando “que se podrá controlar y dejar cuando se quiera”, lo que justifica la intensa campaña contra fumar; no obstante, el acceso es muy fácil y las leyes y normativas, son más eficaces para preservar los derechos de los no-fumadores, que para desmotivar a los que ya lo son.
La componente emocional es fundamental para combatir el hábito, ya que, para muchos fumadores, el tabaco proporciona placer, tranquilidad y relajación, hasta el punto que para muchos, “fumar a veces no es lo peor” haciendo alusión a la salud mental, como ya se observó en el proyecto HABITA desarrollado también desde el colectivo de pacientes en 2021(24); e incluso consideran al tabaco “un amigo que siempre esta cuando se le necesita”.
La adicción a la nicotina es una de las principales barreras, lo que puede explicar el hecho de que las intervenciones más eficaces en cesación tabáquica sean con ella, tal como refleja una reciente revisión de la Cochrane fruto de un metaanálisis con más de 332 ensayos clínicos aleatorizados (25).
Aunque la nicotina es adictiva y no es inocua, no parece ser la causa directa de las enfermedades asociadas habitualmente al tabaquismo (26), si bien, si lo puede ser de otras.
La estrategia más efectiva para afrontar esta adicción es la autocrítica, poner medidas uno mismo y enfocarse en lo positivo de dejarlo. Por el contrario, ocultarlo se desaconseja. Similares recomendaciones en sentido positivo y negativo, se hacen para afrontar la barrera emocional (el hecho de que gusta). En cuanto a la barrera que supone el entorno laboral, igualmente se enfatiza en la importancia de la autocrítica y proactividad. En cambio, frente a la fácil accesibilidad al tabaco, se sugiere evitar pensar en ello.

El grado de satisfacción con la ayuda ofrecida por el SNS es intermedio, y el acompañamiento en el proceso para dejar de fumar es muy bajo, coincidiendo con los hallazgos del proyecto HABITA (24), donde se reflejaba que la mayoría de las personas afrontaba el proceso sin ayuda externa, confiando principalmente en su propia voluntad.

Se ha comprobado que el humo del tabaco contiene unas 7.000 sustancias dañinos (27), y si se elimina la combustión, se puede reducir el daño (28). De hecho, respecto a esta acción, se valoró muy alto el interés por al menos “reducir el daño” si no se puede dejar de fumar.

El término “Reducción de Daños” se refiere a las prácticas orientadas a minimizar los impactos negativos del consumo de drogas y sustancias adictivas, tanto a nivel de salud, social y legal (29). La Reducción de Daños atañe al SNS en su faceta asistencial como es con ciertas drogas (30).

CONCLUSIONES

Las cuatro principales barreras seleccionadas fueron: en el aspecto físico, la adicción a la nicotina; en el emocional, el placer y ayuda que aporta; en cuanto al social, el fácil acceso; y en lo laboral, acompañar o la presión de los compañeros.

Las estrategias más efectivas de afrontamiento incluyen el ser crítico con uno mismo (autocrítica), el poner medidas uno mismo (proactividad) e intentar ver lo positivo (reestructuración cognitiva); mientras que no lo es, el ocultarlo (retirada social).

Dejar de fumar es un desafío real y complejo; y la satisfacción con la ayuda prestada desde el SNS a los fumadores es limitada, así como el mínimo acompañamiento en el proceso para dejar de serlo, considerándose como alternativa muy adecuada, el reducir al menos el daño.

Las Organizaciones de Pacientes pueden desempeñar un papel activo y deben ser invitadas en el diseño e implementación de estrategias de deshabituación tabáquica.

Consecuentemente, el posicionamiento de OAFI y AECOSAR incluye:

•Promover la AUTORRESPONSABILIDAD Y AUTOCUIDADO. Debe educarse desde muy jóvenes, en vida saludable: dieta, ejercicio, hábitos, aficiones, etc.
•SI NO FUMAS, NO FUMES NUNCA. Debe desanimar a la población a fumar.
•SI FUMAS, DEJA DE FUMAR (PERSONALIZAR EL ABORDAJE). Si ya se fuma, la mejor decisión en relación a la salud es dejar de fumar.
•SI FUMAS Y NO PUEDES DEJARLO, REDUCE AL MENOS EL DAÑO. Para aquellos que no pueden o no quieren dejar de fumar, considerar estrategias de reducción del daño.

CARÁCTER INNOVADOR
La lucha contra el tabaco se centra principalmente en la prevención y defensa del no-fumador, aspectos de máxima prioridad; pero son escasos los medios ofrecidos para la deshabituación de quien ya es fumador, limitándose a la las entrevistas motivacionales y ofrecer una farmacología de eficacia relativa; y en ambos casos, con escaso acompañamiento del proceso.

Con el presente estudio hemos escuchado a los consumidores y sabido mejor como plantear eficientemente la deshabituación tabáquica o al menos la reducción del daño; haciendo además participar a las organizaciones de pacientes como agentes activos, en el sistema de salud del país.

DIVULGACIÓN
•Enviar comunicación al menos a un congreso de sociedad científica implicada con la salud articular y al 6th International Congress y 51 Jornadas Nacionales de Socidrogalcohol, a celebrar en Valencia, los días 26-28 de septiembre de 2024.
•Generar artículo en una revista de gestión y de Sociedad Científica.
NIVEL DE APLICABILIDAD
Una vez eliminados prejuicios, es de fácil aplicabilidad.
No implica financiación extra. Solo campañas informativas sin prejuicios.
Las organizaciones de pacientes están al servicio de la sociedad de forma voluntaria.

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